INTRODUCCIÓN

El edificio en cuestión se encuentra situado en la Plaza de San Fernando, centro histórico de la Carmona de Siempre. Es una casa típica Carmonense, de arquitectura mudéjar. Se encuentra cerca de casi todos los monumentos y lugares de interés, como iglesias, conventos, palacios etc. No es necesario ningún medio de transporte; todo el encanto de nuestra ciudad se puede descubrir paseando. Desde esta casa, donde casi todas la habitaciones miran hacia el exterior, se puede disfrutar de vistas privilegiadas del maravilloso entorno, cuyo casco histórico esta considerado como uno de los más excepcionales de la provincia . Disfrutad pues, de este lugar tranquilo y refinado, en un marco único de una ciudad bimilenária.

EL EDIFICIO HISTORICO

El solar que ocupa la vivienda actualmente, se corresponde en parte con los edificios principales que debieron ocupar el foro romano, de carácter civil y religioso, y que sin lugar a dudas se encuentran en su subsuelo, y por extensión en toda la citada plaza. De este periodo tenemos algunas muestras de interés de tipo arqueológico, como son diferentes elementos de acarreo en muros de sillería y aparejo romano en diferentes paramentos de la casa, como los del baño de la habitación mudéjar en el patio izquierdo, compuesto por una entrada adintelada con sillería romana y que más tarde estudiaremos. Cabe destacar así mismo el maravilloso pavimento «In Situ» encontrado en una de las habitaciones del patio derecho, en el cual se documentó a sólo 80 cm. De la cota actual un pavimento del tipo llamado

«Opus Spicatum» consistente en pequeñas piezas de barro de 7x10x2 yuxtapuestas en forma de espiga, y que podemos situar en el siglo II al III d.C.

También existe un interesante expositor, Con objetos de tipo arqueológico procedente de las demoliciones y encontrados durante las labores de restauración de la vivienda, y que son exponente por su calidad y clase, de la importancia de los edificios situados en su entorno.
Sin embargo, la etapa en la que podemos decir se comienza a levantar el edifico que hoy conocemos data de los años finales del siglo XIV. En primer lugar, el muro anteriormente aludido, de tipología medieval, formado por lajas de sillería romana de acarreo, y compuesta además por sillarejo y piedra natural, con ligazón de adobe y tapial, muy próximas a las labores medievales realizadas por los alarifes mudéjares tras la Reconquista Castellana durante el siglo XIII.

No obstante, será en el siglo XV, y principios de la siguiente centuria, cuando se comenzará el levantamiento progresivo de los muros de carga de la vivienda de planta baja, consistente en crujías o habitáculos de unos 3 metros de ancho máximo, y de una longitud variable entre los seis y diezmetros. Toda la fábrica de sus muros esta realizada de fábrica de ladrillo macizo de 14 x 29 xó de grosor propias de esta época. De esta etapa primitiva tenemos bien conservada, el testero frontero del patio izquierdo.

Se compone de un plano consistente en dos elementos del mayor interés. En primer lugar podemos observar el arco apuntado medieval laborado con dóvelas de ladrillo macizo con escuadra rebajada, propias de las labores del siglo XV, bajo el cual se conserva un pequeño habitáculo de forma irregular subterráneo, aproximadamente de la misma cronología, bien pudo tener el fin de servir como fresquera o almacén para alimentos. El otro interesante elementoy quizás el mas sobresaliente aparecido en la casa, es una portada mudéjar adintelada. Esta compuesta por fajón, llave, y azulejos de remate de tipo mudejárico, considerándose como unas de los pocos modelos que subsisten conocidos adintelados, y no en forma de arco de herradura como es lo habitual en la región.

Durante los años finales del siglo XVI y en la primera etapa del siguiente, sufre la primera gran transformación de su larga trayectoria historico-arquitectónica. Sedemuelen los muros de su segunda planta de fachada, volviéndolos a levantar, junto con cuatro medios puntos abiertos a la plaza , y decorándolos con una labor vista de ladrillo rojo y llagueado en estuco blanco, hoy desaparecido. Hay que recordar, que la vivienda en este periodo era solo de dos plantas, y que la tercera, que hoy presenta, se levantó en el siglo XVIII. También conviene indicar, que era este exactamente el cuerpo principal de la casa, es decir, de la esquina que vuelve hacia la calle Madre de Dios, hasta justamente la línea en la que se apoya el ultimo de los medios puntos antes aludidos. El cuerpo que llamamos callejón, que es por donde actualmente se realiza el ingreso a la vivienda, era una calle, que quedándose en deshuso hacia el siglo XVII se acupó para incorpararlo a la vivienda y que queda definido en el plano de la fachada perfectamente, rematándolo con una azotea , con su pretil y dos jarras de cerámica sevillana, que es como de antiguo había estado.

La que llamamos como segunda transformación estructural de la vivienda, acaece durante el siglo XVIII. Se levanta el aludido callejón, y se corona el cuerpo principal de la casa, con una tercera planta, con cubierta acuatro aguas, con apertura de cuatro huecos de ventana con vistas a la plaza, y decorada con un esgrafiado a base de simulación de sillería muy del gusto neoclásico, de finales del aludido siglo, y que tuvo su extensión en el revestimiento posterior de toda la fachada, incluyendo la del torreón. Es efectivamente en esta época, cuando la casa mudejárica, de grandes patios y reducidos espacios habitables, se convierte y se adapta para vivienda multifamiliar, debido al aumento de la demografia humana en este siglo. De manera, que esta casa de tipología mudejar, de grandes patios y reducidos espacios habitables, se transformara de manera definitaria, en viviendas para ser alquiladas a numerosos vecinos que las habitaran mas tarde. Este paso, obligará a realizar profundas transformaciones estructurales para adaptarlas a este fin, por lo que muchos elementos propios de ella, se enmascararan, o simplemente desapareceran, como arcos, muros, elementos decorativos etc. Será esta la razón principal, por la cual nos han llegado pocos elementos de estas primeras etapas posteriores a la reconquista.

Durante el siglo XIX se seguirá con las transformaciones periódicas. La más importante será la realizada en el patio derecho, donde se redujo el mismo patio, antaño con pilares y arcos de tipo conupial del XV-XVI para crear una habitación mas a la vivienda, y una dependencia con cubierta corrida de bóveda de cañón de ladrillo plano, que hoy se destina a oficinas.
Durante el siglo XX, no se realizan obras importantes en la vivienda, solo cambios de tipo a nivel de revestimiento y cambios de acceso a plantas superiores mediante escaleras de tipo popular.

Por fin, las obras de restauración levadas a cabo en estos momentos para destinarla a hotel, amén de dejar al descubierto elementos artísticos de mérito , ha desenmascarado las intervenciones desacertadas de los siglos XIX y XX y algunas del XVIII, que han dejado al descubierto la estructura mudéjar primitiva de la vivienda, que es en suma, el estilo con la que se creo, y fue concebida.